¿Qué es el abuso de sustancias?
El abuso de sustancias es el consumo de drogas o alcohol que causa problemas en la vida de una persona. Los niños que abusan de las drogas y del alcohol corren más riesgos de tener un problema grave de consumo de drogas cuando crezcan. El abuso de sustancias podría también causar fracaso escolar y falta de criterio, lo cual aumenta el riesgo de que los niños sufran accidentes, violencia, relaciones sexuales no planificadas e inseguras, y suicidio.
Los niños abusan de muchos tipos de drogas, legales e ilegales, que incluyen:
- alcohol
- heroína y cocaína
- inhalantes (gases de pegamentos, diluyentes de pintura o líquido para encendedores)
- alucinógenos, como LSD
- drogas hechas por el hombre como la metanfetamina (speed) y el éxtasis
- marihuana (hierba)
- narcóticos (analgésicos)
- nicotina
- medicamentos de venta libre para la tos, para el resfrío, para dormir y para bajar de peso
- medicamentos recetados
- estimulantes
- esteroides
El abuso de sustancias puede causar adicción. Cuando un niño es adicto, el consumo de sustancias se convierte en el centro de su atención. No le importa nada (salud, escuela, trabajo ni familia), salvo conseguir y consumir drogas.
Algunas drogas también crean una necesidad física y un intenso síndrome de abstinencia cuando se las deja de consumir. La abstinencia de narcóticos (como la heroína y la metadona) es muy dolorosa. La abstinencia del alcohol y otros sedantes hipnóticos pueden ser potencialmente mortales, y pueden causar convulsiones y delirios.
¿Cómo me doy cuenta de que mi hijo está abusando de las drogas o del alcohol?
Los niños que abusan del alcohol o de las drogas podrían mostrar los siguientes signos:
- son torpes y tienen muchos accidentes;
- son incapaces de concentrarse;
- están irritables, enojados o preocupados todo el tiempo;
- tienen dolores de cabeza, dolor de estómago, temblores, tos, habla poco clara, tambaleo o goteo nasal constante;
- tienen cambios repentinos en su aspecto, como ojos rojos e hinchados, o cambios rápidos de peso;
- les cuesta dormir o despertarse, y siempre parecen cansados;
- pierden interés en las actividades que les gustaban, como los pasatiempos o deportes;
- pierden interés en la escuela o dejan de ir;
- se alejan de los amigos o comienzan a frecuentar niños que consumen drogas.
Algunas de estas señales de advertencia también pueden ser signos de otros problemas. El profesional médico de su hijo debería examinarlo y preguntarle acerca de los síntomas para asegurarse de que no existan causas físicas. Si los problemas no son físicos, es posible que derive a su hijo a un especialista en salud mental.
¿Qué puedo hacer para ayudar a mi hijo?
- Sea un buen ejemplo. Los niños tienden a hacer lo que ven, no lo que escuchan.
- Preste atención a su hijo cuando le exprese sentimientos y preocupaciones, para que se sienta a gusto hablando con usted.
- Enséñele a su hijo a sentirse seguro de sus decisiones. Cuando su hijo sea capaz de tomar decisiones correctas de todo tipo, usted estará más seguro de su capacidad de tomar decisiones correctas relacionadas con las drogas y el alcohol.
- Enséñele a evitar situaciones que hacen probable el consumo de drogas o alcohol.
- Ofrézcale información adecuada para la edad de su hijo y su capacidad de entender. Si está mirando televisión con su hijo de 6 años y se menciona la marihuana en un programa, usted puede decir: “¿Sabes qué es la marihuana? Es una droga mala que puede dañarte el cuerpo”. Si su hijo le hace más preguntas, contéstelas. Si no, puede terminar la conversación en ese momento. El mensaje suele transmitirse mejor con comentarios cortos, simples y que se repiten con frecuencia. Si su hijo tiene 12 años, podrá explicarle qué es y qué aspecto tienen el éxtasis y el crack, y cómo afectan al cuerpo.
- Dígale claramente cuál es la posición de la familia con relación a las drogas. Explíquele a su hijo la diferencia entre las drogas de las cuales se abusa y los medicamentos que se toman para las enfermedades.
- Hable de las características de un buen amigo. La presión de los amigos es una de las principales razones que llevan a los niños a consumir drogas y alcohol. Ayude a su hijo a entender que los amigos que lo presionan para consumir alcohol o drogas no son verdaderos amigos. Practique con su hijo formas de decirles no a los amigos sin que se convierta en un marginado social.
- Fortalezca la autoestima. Los niños que se sienten bien con sí mismos tienen menos probabilidades de recurrir a sustancias ilícitas para escapar de la realidad. Felicite a su hijo por todo lo que haga bien. Si necesita criticar algo, critique la acción, no la persona. Dedíquele a su hijo al menos 15 minutos por día, sin interrupciones. Pueden hablar, jugar o caminar.
- Si sospecha que hay un problema, pídale ayuda al profesional médico de su hijo, a un profesional de la salud mental o a un centro de tratamiento local.
Para obtener más información, llame al Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (National Institute on Drug Abuse) al 301-443-1124 o visite el sitio web en http://www.nida.nih.gov.
Desarrollado por RelayHealth.
Este material se revisa periódicamente y está sujeto a cambios en la medida que aparezca nueva información médica. Se proporciona sólo para fines informativos y educativos, y no pretende reemplazar la evaluación, consejo, diagnóstico o tratamiento médico proporcionados por su profesional de atención de la salud.
© 2011 RelayHealth and/or its affiliates. All rights reserved.