El rotavirus ha sido por mucho tiempo la causa más frecuente de infecciones graves en los intestinos, que generalmente causa diarrea. Aunque la mayoría de los casos ocurren entre los 6 meses y los 2 años de edad, una infección por rotavirus podría afectar a personas de cualquier edad. La vacuna ha reducido en gran medida el número de infecciones por rotavirus.
Las personas se infectan con el rotavirus debido a la exposición a otras personas que tienen la infección. El virus puede sobrevivir sobre superficies, en el agua y sobre la piel. Con frecuencia, los niños contraen la infección por el virus sobre la piel. En los Estados Unidos, la mayoría de las infecciones ocurren en invierno.
Los síntomas pueden incluir:
El profesional médico de su hijo le preguntará sobre los síntomas. Se puede realizar una prueba de la materia fecal de su hijo para verificar si la causa es el rotavirus, pero generalmente no es necesario. Con diarrea severa, es posible que el profesional médico de su hijo quiera realizar un análisis de sangre para controlar si su hijo está muy deshidratado.
No hay medicamentos específicos que alivien la diarrea causada por el rotavirus. El problema más grave causado por la diarrea severa es la deshidratación, por lo que es importante reemplazar los líquidos. Si es posible, haga que su hijo a tome más líquidos. Si los vómitos son graves, su profesional médico puede querer darle líquidos a su hijo a través de vía intravenosa (IV).
Los líquidos deberían administrarse lo más pronto posible en la enfermedad (dentro de las 24 horas), para ayudar a curar los intestinos. A los bebés se les podría dar leche materna, leche de fórmula o productos que contengan electrolitos (sales) que están específicamente hechos para bebés. Su profesional médico puede recomendarle un producto. Los bebés no deberían recibir solo agua, debido a que también es necesario reponer las sales que se pierden en la diarrea.
A los niños mayores se les puede dar agua o bebidas deportivas en agua. Deben evitarse los jugos de fruta y los refrescos carbonatados porque pueden empeorar la diarrea.
Muchos padres preguntan acerca del uso de “probióticos” (como el lactobacilo) para ayudar a recuperarse de la diarrea. La capacidad de los probióticos para ayudar a controlar los síntomas todavía es controvertida y los estudios recientes han mostrado resultados contradictorios.
La enfermedad causada por el rotavirus generalmente comienza de 12 horas a 4 días después de haber estado expuesto al virus. Si se presentan vómitos, por lo general, durarán de 2 a 3 días. La fiebre y la diarrea generalmente duran de 4 a 8 días. Según el grado del daño al intestino, la diarrea puede durar hasta 2 semanas, aunque su hijo se sienta bien.
Es muy difícil para un niño evitar la exposición al rotavirus. Casi todos los niños se infectan en algún momento dentro de los primeros 3 años de vida. Se recomienda la vacuna contra el rotavirus para prevenir enfermedades graves (que pueden causar deshidratación o la muerte). La vacuna es muy eficaz. La CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades) dice que la vacuna prevendrá alrededor del 74% de todos los casos de rotavirus. Ha prevenido el 98% de casos graves. Hay dos marcas de vacuna contra el rotavirus. Un bebé debería recibir 2 o 3 dosis, según la marca que se use.
La primera dosis podría administrarse a las 6 semanas de edad, y debería administrarse hasta las 14 semanas y 6 días. La última dosis debería administrarse a los 8 meses de edad.
Esta vacuna debe administrarse al mismo tiempo que otras inyecciones, tales como la vacuna DTPa, de la hepatitis B y neumonía.
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