La enfermedad del corazón congénita es un problema del corazón con el que se nace. Significa que el corazón no se desarrolló normalmente antes del nacimiento.
La enfermedad o los defectos del corazón congénitos pueden causar tres tipos de problemas:
Un recorrido anormal del flujo de sangre generalmente ocurre cuando hay un orificio en las paredes del corazón. A veces, hay una conexión anormal entre 2 arterias fuera del corazón. En algunos casos, la sangre que debería fluir a los pulmones para oxigenarse fluye en cambio al resto del cuerpo. En otros casos, la sangre que debería ir al resto del cuerpo podría ir a los pulmones. Algunas veces, el ritmo cardíaco (los latidos) no es normal.
Es posible que no se detecten defectos del corazón congénitos leves hasta la adultez.
La mayor parte del tiempo, la causa de la enfermedad del corazón congénita se desconoce.
Los siguientes son factores que aumentan el riesgo de nacer con un defecto del corazón:
Algunos medicamentos tomados por la madre durante el embarazo, o incluso uno o dos meses antes del embarazo, pueden aumentar el riesgo de que un bebé nazca con un defecto del corazón.
Si el defecto es leve, es posible que no haya síntomas. Sin embargo, la mayoría de los defectos causan un silbido o un soplo cuando la sangre pasa por el corazón. Los profesionales médicos pueden escuchar el soplo con un estetoscopio.
Algunos posibles síntomas de un defecto del corazón son dificultad para respirar, dolor de pecho, o aspecto azulado de la piel o los labios (cianosis).
El profesional médico de su hijo le preguntará sobre la historia clínica de su hijo y hará un examen.
Las siguientes son algunas de las pruebas que quizás se hagan:
Es posible que el defecto sea pequeño y no necesite tratamiento. A veces, mejora sin tratamiento. Si el defecto del corazón congénito es grave, es posible que necesite reparación. Según el tipo de defecto, esto puede hacerse con un cateterismo cardíaco o una cirugía a corazón abierto.
Muchas personas con defectos del corazón congénitos pueden llevar una vida normal. Algunas quizás necesiten limitar sus actividades y tomar medicamentos.
Si su hijo tiene enfermedad del corazón congénita y no presenta síntomas, debe someterse a controles regulares. Es posible que deba hacer visitas de seguimiento regulares a un especialista cardiaco.
Consulte al profesional médico si su hijo debe tomar antibióticos para prevenir infecciones antes de realizarse un tratamiento dental, o procedimientos que incluyan el recto, la vejiga o la vagina.