El dar de mamar o alimentar con biberón puede considerarse prolongado después de los 18 meses de edad. El niño pequeño mayorcito que sólo ocasionalmente se amamanta o bebe de un biberón tal vez no necesite que se le presione para renunciar al biberón o al pecho. El destetar retrasado debe considerarse un problema solamente si está ocasionando uno o más de los siguientes tipos de daños:
Si su bebé tiene alguno de estos problemas, lea la siguiente sección. De lo contrario, siga dando de mamar o con biberón a su bebé cuando el quiera (pero no más de tres veces al día) y no se preocupe por destetarlo totalmente.
Para disminuir el alimentar dando de mamar o con biberón hasta un nivel que no ocasione ninguno de los problemas descritos anteriormente, tome las siguientes medidas:
Cuando su hijo regrese con usted pidiendo alimentación adicional, en lugar de ello déle abrazos y más atención. Ponga a su hijo en un programa de tres comidas principales al día, más dos o tres bocadillos nutritivos.
La alimentación con vasito se necesita como sustituto para dar de mamar o biberón, independientemente de la edad a la cual sea destetado. Entre más tiempo pase un niño pequeño sin usar un vasito, menos dispuesto estará a intentarlo. Una forma natural de evitar que la alimentación dando de mamar o con biberón se convierta en algo demasiado importante es por empezar la alimentación diaria con un vasito a los 5 o 6 meses de edad.
El biberón como compañero puede estorbar el desarrollo normal que exige hablar o jugar con las dos manos. También puede contribuir a problemas de caries dental. Usted puede explicarle a su hijo que "No es bueno para ti que andes cargando con un biberón" o bien "Ya estás muy grande para eso".
Además de ocasionar problemas con el sueño, el llevarse un biberón de fórmula o leche a la cama puede ocasionar graves caries dentales. Usted puede ofrecerle las explicaciones sugeridas anteriormente.
Una vez que haya realizado estos cambios, no necesita nada más a menos que quiera dejar de mamar o de dar biberón completamente. Intente destetarlo totalmente solamente si su familia no está sometida a presión (como podría suceder por cambiarse de casa o por algún otro cambio importante) y su hijo no está en crisis (como enfermo o si está aprendiendo a usar el baño). El destetar del seno o el biberón en favor del vasito siempre deberá hacerse poco a poco y con amor. El "cortar en seco" o de forma repentina sólo logrará que su hijo se enoje, se le acerque más, y se sienta triste. Aun cuando no hay consenso sobre el mejor momento para destetar, hay acuerdo sobre la técnica apropiada.
Si su hijo rechaza la fórmula en un vasito, ofrezca leche materna extraída en un vasito. Si eso falla, añada a la fórmula un saborizante que le guste. Si su hijo es mayor de 12 meses, puede usar leche entera. Algunos niños no aceptarán un vasito hasta después de que se les haya amamantado por varios minutos.
Primero, elimine la alimentación que sea menos importante para su hijo (generalmente la de medio día). Sustitúyala con una alimentación utilizando un vasito. Como una vez por semana quite otra comida dándole de mamar. Generalmente lo último a lo que se renuncia es el mamar a la hora de dormir. No hay razón para no seguir dando de mamar a la hora de dormir, durante meses si esto es lo que usted y su hijo quieren.
Algunas madres prefieren destetar disminuyendo la duración de las comidas. Acorte todas las comidas en dos minutos cada semana hasta que duren cinco minutos. Después elimínelas una a la vez.
Debido a que el pecho opera bajo el principio de la oferta y la demanda, la menor cantidad de tiempo de mamar reduce eventualmente la cantidad de leche que sus pechos producen. Mientras tanto, extraiga sólo la leche necesaria para aliviar el dolor del pecho a causa del congestionamiento. (Esto es mejor que ponerse el bebé al pecho por un minuto, porque probablemente no va a querer dejarlo). Recuerde que vaciar totalmente el pecho aumenta la producción de leche.
Es posible que un producto con acetaminofén también le ayude aliviar las molestias.
Explique a su hijo que la leche ya se fue del pecho. Si su hijo tiene una fuerte necesidad de chupar, un chupón podrá ser útil.
Use leche sin descremar si su hijo tiene 1 año o más de edad.
Elimine una comida en biberón cada 3 o 4 días, dependiendo de la reacción de su hijo. Sustituya cada comida en biberón con una comida en vasito y más abrazos.
La última comida del día es generalmente la más importante para el niño. Cuando llegue el momento de renunciar a esta comida, disminuya poco a poco la cantidad de leche en el biberón cada día durante una semana.
Usted puede explicar que los biberones son para los bebés pequeñitos. A lo mejor hasta puede pedirle a su hijo que le ayude a llevar los biberones a casa de una vecina. Si su hijo tiene una firme necesidad de chupar, ofrézcale un chupón.
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